El ministro Nicolás Trotta admitió que no hay infraestructura que permita la vuelta absoluta de las clases

 

En medio del debate sobre la vuelta de las clases presenciales, el ministro Nicolás Trotta destacó que una de las prioridades del Gobierno es que se reabran las escuelas. No obstante, el titular de Educación aclaró: “No existe infraestructura que pueda permitir la presencialidad absoluta”.

El funcionario pidió “poner en valor lo transitado y la experiencia del 2020, y trabajar fuertemente en las próximas semanas para cumplir el objetivo de que la presencialidad vuelva a ser el ordenador de nuestro sistema educativo”.

En diálogo con C5N, Trotta señaló que en las provincias buscan “maximizar toda la presencialidad posible” de acuerdo a las características de cada una.

Sobre la “nueva normalidad”, el Ministro de Educación detalló que en una primera etapa todas las jurisdicciones deberán transitar un “sistema dual”: con clases presenciales y también virtuales. En ese mismo sentido, dijo que se maximizará “la presencialidad en la escuela y algunos días en el hogar, salvo aquellas escuelas rurales con grupos pequeños de 10, 15 estudiantes donde quizás se pueda cumplir el 100% de presencialidad”.

“Creemos que la vuelta debe ser segura, implica la aplicación de protocolos y distanciamiento físico dentro del aula”, expresó el ministro, al tiempo que indicó que se está terminando de delinear el esquema de vacunación de 1.300.000 docentes y no docentes de todo el país, para un progresivo regreso a las aulas.

Además de apuntar a la recuperación de aprendizajes pendientes del año pasado, Trotta anticipó que otro objetivo es que se aborde el “impacto subjetivo que la pandemia ha tenido en chicos y chicas”.

También marcó que comenzando el 1 de marzo, “intensificando los aprendizajes” y cumpliendo el ciclo lectivo “con el proceso complejo de reorganización pedagógica” se van a poder resolver los “desafíos pendientes del 2020″.

No obstante, el ministro aclaró que en “ningún país del mundo hay presencialidad del 100%”. Y la situación argentina no escapa a esa realidad: “No existe infraestructura que pueda permitir la presencialidad absoluta como era previo a la pandemia”. En el mismo tono, remarcó que hay que “ser muy cuidadosos” y que se buscará “una presencialidad cuidada en el marco de una realidad compleja”.