Rusia acusó a Estados Unidos en la ONU de orquestar un golpe de Estado en Venezuela
Una nueva pulseada política entre los Estados Unidos y Rusia quedó en evidencia este sábado durante la sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en la que se trató la crisis en Venezuela.
Por un lado Washington presionó para reconocer al autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó, y por el otro, Moscú denunció un intento de «orquestar un golpe de estado».
El representante ruso ante el organismo, Vassily Nebenzia, rechazó discutir el tema en el Consejo de Seguridad porque es una cuestión interna porque no supone «ninguna amenaza para la paz y la seguridad».
Así, Rusia denunció el «quebrantamiento del derecho internacional» y un intento de «orquestar un golpe de estado» en la nación caribeña. Nicolás Maduro asumió un nuevo mandato como presidente venezolano a pesar de las críticas por falta de transparencia en los comicios.
Por su parte el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, expresó que «el pueblo venezolano se muere de hambre» y que desplazar a Maduro del poder es indispensable.
«Tenemos un nuevo presidente en Venezuela, Juan Guaidó, que ha prometido celebrar elecciones y devolver el orden constitucional”, sentenció el funcionario estadounidense.
Hasta el momento los gobiernos de Alemania, España, Francia, Portugal y el Reino Unido presionaron a Maduro para que llame a elecciones anticipadas y libres en los próximos ocho días.
Pompeo fue más allá al pedir ante la prensa que los países «se aseguren de desconectar sus sistemas financieros del régimen de Maduro y permitan que los activos que pertenecen al pueblo venezolano vayan a los gobernadores legítimos».
La novedad no fue bien recibida por el representante bolivariano en la ONU.
«¿Europa dándonos ocho días de qué? ¿De dónde sacan que tienen potestad alguna para darnos ultimátums?», disparó el canciller venezolano, Jorge Arreaza, ante el Consejo de Seguridad.
Tanto Rusia como Estados Unidos y China tienen poder de veto dentro del Consejo de Seguridad, y los tres países tienen intereses en la zona del Caribe. En el caso de Moscú y Beijing incluso instalaron bases en Venezuela en los últimos años.
Pompeo afirmó tras la sesión que «China y Rusia están apoyando un régimen fallido con la esperanza de recuperar miles de millones de dólares en inversiones mal consideradas y en la asistencia realizada a lo largo de los años».
«Ese dinero nunca tuvo la intención de ayudar al pueblo venezolano, sino que llenó los bolsillos del régimen de Maduro, sus amigos y sus benefactores», sentenció.
Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Panamá, Perú, República Dominicana y Paraguay se alinearon tras los Estados Unidos mientras que Bolivia, Cuba y Nicaragua se sumaron a China y Rusia.
