Violencia, represión y amenazas por parte de la intervención de la UOCRA
Los trabajadores que ingresaron esta mañana a trabajar a las 6.30 en la puerta 4 de YPF, se encontraron con una panorama convulsionado por las nuevas amenazas.
Frente a una nueva intención por parte del grupo de obreros de llevar adelante un nuevo reclamo por las condiciones que están denunciando para trabajar, la intervención de la UOCRA respondió con mayor violencia: represión, amenazas y tiroteos a lo largo de la primera mañana.
El viernes pasado ya habían advertido que había un grupo “de apriete” perteneciente a la actual intervención de la UOCRA que pretendía violentamente que cesaran todos los reclamos.
“Sucedió lo que denuncié el día viernes ante la justicia. Recién le acaban tirotear la casa a mi hermano Cristian, que supuestamente tenia custodia. También tirotearon la casa de otro compañero que acompaña a mi padre que está detenido”, dijo Agustín Medina, hijo del Pata Medina.
“Hay mujeres y niños y vinieron a reprimir. Dejaron la zona liberada para que se arme un enfrentamiento y generar un hecho para perjudicar al Pata Medina y quedarse con el sindicato. Del otro lado están los interventores, que son 100 tipos y ninguno tiene ropa de trabajo”, denunció Agustín Medina.
Esta mañana había un total de cien personas frente a la puerta 4 de la destilería que pertenecen a la intervención, protegidas por la policía. Por otra parte, se encontraba un cordón conformado por otro grupo de cien personas que responden a la ex UOCRA, liderada por Juan Pablo “Pata” Medina.
En el lugar había gente armada con cuchillas y fierros. Los grupos de choque estarían conformados por barra bravas.
Cabe recordar que la justicia está investigando a Facundo Badaraco, quien además de haber estado implicado en la salida de un preso de un penal hace un mes para que forme parte de algunas operaciones de la UOCRA a través de la intervención, es quien estaría incitando y convocando a barras bravas de La Plata para agredir, amenazar y adoctrinar a los trabajadores que no comparten la gestión del interventor Carlos Vergara, quien llegó a intervenir el gremio con la anuencia política del gobierno de María Eugenia Vidal.