El represor recibió la semana pasada su cuarta condena a prisión perpetua. Como se sabe, está desde marzo en el Complejo Penitenciario de Ezeiza, tras haber pasado tres meses de arresto domiciliario en Mar del Plata. Ahora, la Corte Suprema le quitó  el beneficio de la prisión domiciliaria en dos causas por delitos de lesa humanidad cometidos durante la pasada dictadura.

Por eso, el ex comisario fue llevado de vuelta a la cárcel. El pronunciamiento de hoy fue en línea con el fallo Bergés de 2016. En esa ocasión, la Corte estableció que la detención domiciliaria debe ser precedida por informes del Cuerpo Médico Forense «porque su imparcialidad está garantizada por normas específicas», y que las conclusiones de los informes deben ser controladas por las partes.

Rosenkrantz no acompañó las firmas de Elena Highton de Nolasco, Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti.

Cabe recordar que Etchecolatz acumuló causas en su contra desde el fin de la dictadura pos secuestros, torturas, asesinatos, desapariciones y robo de bebés. En 2006 recibió su primera condena a perpetua en La Plata: horas antes de la sentencia desapareció Jorge Julio López, testigo clave de la querella.

Además, tiene otras condenas, como la del Circuito Camps, y perpetua por los crímenes de Puente 12, cometidos en la División Cuatrerismo de la Brigada Güemes, en La Matanza; y en la comisaría 1° de Monte Grande.