Finalizó una nueva edición de los museos en «turno noche»

 

Los museos platenses su mantuvieron abiertos por la noche y la experiencia volvió a ser un éxito. Ayer miles de visitantes recorrieron las principales salas de la Región que, con múltiples propuestas culturales, históricas, artísticas y científicas, abrieron sus puertas de par en par para la tradicional cita denominada “Museos a la luz de la Luna”, propuesta que cada vez está más consolidada como un clásico de la Región y suma más adeptos cada año.

Anoche, los platenses se lanzaron de a miles a las salas de la Ciudad y en algunas se vieron varias cuadras de cola.

Desde poco antes de las 19, hora oficial a la que comenzó la movida, la gente empezó a acercarse a los museos que se sumaron a esta edición; muchos de los visitantes utilizando los vouchers para viajar gratis en los micros municipales.

Los organizadores sugirieron nueve circuitos para recorrer, cada uno de ellos pensado por un hilo conductor temático o por su agrupamiento geográfico. No obstante, eran optativos y si bien hubo algunos recorridos organizados, en rigor la gente fue de sala en sala impulsada más por sus intereses y los atractivos especiales con que se esperaba a los visitantes en cada sala.

Esta vez predominaron las familias, aunque también se observaron muchos grupos de amigos y, como no, algunos visitantes solitarios.

Como cada año, el Museo de La Plata, en el Bosque, fue uno de los epicentros de la celebración. Tras la caída del sol, empezaron a congregarse los visitantes en las escalinatas, donde la Orquesta Escuela UNLP, integrada por chicos y chicas de distintos barrios platenses, abrió la velada. Grandes y chicos llegaban linterna en mano ya que dentro del Museo muchas salas estaban en oscuridad para hacer un recorrido especial para redescubrir extraordinarios objetos. Ante la masiva afluencia entrar no era sencillo. Se vieron varias cuadras de gente haciendo fila esperando para poder entrar. La cola llegaba casi hasta la calle 52.

En CASAbierta, sobre calle 47, se pudo conocer la casona de principios de siglo que forma parte del catálogo de casas patrimoniales platense y que funciona como casa museo con mobiliario y objetos conservados desde sus orígenes. En el Museo de la Anexa, en tanto, grandes y chicos se sumaron a una noche de ciencia y laboratorio, con experimentos.

La Biblioteca Pública, sobre plaza Rocha 137, también ofreció lo suyo: con talleres y actividades, se exhibió la muestra “Comunicaciones. Envíos vía postal” de Edgardo Antonio Vigo. Pero un imán para los visitantes también fueron los libros antiguos, revistas y periódicos, raros, especiales y antiguos.

Quienes llegaron hasta el complejo bibliotecario López Merino, de 49 entre diagonal 74 y 12 conocieron los secretos de la historia del Palacio y sus habitantes. Los clubes Gimnasia y Estudiantes se sumaron también a esta noche especial, con recorridos históricos, exposiciones y actividades en sus respectivos museos.