Se metieron en la casa, la atacaron con gas pimienta y le secuestraron al hijo

 

Un salvaje episodio tuvo lugar durante horas de la tarde de ayer en la localidad de El Peligro. Allí, según indicaron voceros oficiales, una mujer fue víctima de un bestial episodio por parte de cuatro individuos, un hombre y tres mujeres, que se metieron por la fuerza en su hogar.

El hecho sucedió en la zona de 415 y 209, cuando pasadas las 18 la damnificada, de 26 años, se encontraba en su casa junto a su pequeño hijo. Sin embargo, en ese momento comenzó a escuchar un fuerte ruido desde la entrada.

No obstante, antes de que pudiera siquiera levantarse a ir a inspeccionar lo que estaba pasando, la puerta principal cayó, derribada de una feroz patada. Del otro lado había cuatro personas, a quien la damnificada logró identificar de inmediato. Sin embargo, antes de que pudiera siquiera reaccionar, las tres mujeres se metieron en la propiedad, mientras que el hombre se quedó fuera.

Una de las femeninas le arrojó entonces gas pimienta en el rostro, tras lo cual las otras dos comenzaron a golpearla y la terminaron sacando de la vivienda por la fuerza. No hicieron lo mismo con el hijo de la víctima, de tan solo 5 años, a quien mantuvieron cautivo en el interior.

Como pudo, la mujer se las ingenió para pedir ayuda y fue de este modo que logró dar aviso al 911. Al cabo de unos minutos, un patrullero llegó al lugar y los uniformados pusieron bajo custodia a todos los involucrados, para luego rescatar al niño y devolverlo con su madre.

“La damnificada posee una orden judicial emitida por el Juzgado de Familia n° 6 de La Plata, para residir en la finca de su expareja”, detalló una fuente consultada. Además, agregó que el sospechoso está excluido del inmueble, motivo por el cual ella logró quedarse a vivir ahí junto con su hijo.

El motivo del ataque habría sido justamente querer “recuperar” la casa, ya que los agresores son su expareja, la hermana del hombre y dos amigas de esta última. Todos quedaron bajo custodia y fueron trasladados a la comisaría Séptima por el delito de “usurpación, violación de domicilio, lesiones, daños y sustracción de menor”.

Por su parte, personal médico atendió a la víctima y se constató que, a pesar de los golpes y el gas pimienta, no había sufrido heridas que pusieran en riesgo su vida, por lo que fue dada de alta a las pocas horas. Tomó intervención la UFI en turno.